2 Samuel 19:
Este capítulo inicia contando que David lloraba por la muerte de su hijo Absalón. La victoria que había logrado estaba opacada por la pérdida de su hijo. Entonces Joab lo hace reaccionar, haciéndole entender que no era momento de lamentarse, sino de actuar sabiamente; que él debía ponerse al frente para lograr restaurar el reino que se había dividido. Cuando pasamos por crisis, debemos reaccionar a tiempo para resolver las situaciones, y no quedarnos lamentándonos. Pensar de manera objetiva y no emotiva. Pensar en los demás y en nuestra responsabilidad.
(19.16–23). Muchos rebeldes tratan de «cambiar de tonada» cuando el rey regresa. David estaba tratando de reunir su fragmentado reino, de modo que no podía darse el lujo de perder ninguna de las tribus, pero más tarde Salomón le dio a Simei su merecido (1 R 2.36–46).
(19.24–30). No dice nada de bueno en cuanto a Siba que arribe en compañía de Simei (vv. 16–17). No cabe duda que Siba mintió con respecto a su amo y David trató de emitir un juicio equitativo. Triste como suena, su precipitada decisión anterior hizo difícil arreglar las cosas del todo; pero apreciamos la actitud de David. Vemos en Mefi-boset un buen ejemplo de preocupación por el rey ausente.
(19.31–43). Barzilai había salido al encuentro de la compañía de David en la hora de necesidad (17.27–29); y sin duda alguna este acto de bondad le costó algunos amigos, ¡pero fue maravillosamente recompensado cuando el rey regresó! Barzilai no quería dejar su casa y morir lejos de sus seres queridos, de modo que sugirió que le diera la bendición a Quimam (tal vez un hijo o nieto). Jeremías 41.17 nos informa que David le dio a Quimam la tierra cerca de Belén y que su familia vivió allí muchos años.
Todo este episodio del rechazo y regreso de David ilustra las actitudes de la gente de hoy respecto a Cristo. Hay unos pocos leales que están a favor del Rey ausente y existe la mayoría egoísta que prefiere rebelarse. Pero, ¿qué ocurrirá cuando el Rey vuelva? ¿Y qué estamos haciendo nosotros, sus seguidores, para acelerar su venida? (2 P 3.12).
Wiersbe, Warren W., Bosquejos Expositivos de la Biblia, AT y NT, (Nashville, TN: Editorial Caribe Inc.) 2000, c1995.