sábado, 11 de agosto de 2007


2 Reyes 23:
El rey Josías dirigió al pueblo a hacer pacto con Dios: "Entonces el rey mandó reunir con él a todos los ancianos de Judá y de Jerusalén. 2 Y subió el rey a la casa de Jehová con todos los varones de Judá, y con todos los moradores de Jerusalén, con los sacerdotes y profetas y con todo el pueblo, desde el más chico hasta el más grande; y leyó, oyéndolo ellos, todas las palabras del libro del pacto que había sido hallado en la casa de Jehová. 3 Y poniéndose el rey en pie junto a la columna, hizo pacto delante de Jehová, de que irían en pos de Jehová, y guardarían sus mandamientos, sus testimonios y sus estatutos, con todo el corazón y con toda el alma, y que cumplirían las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro. Y todo el pueblo confirmó el pacto" (v. 1-3). Hacer un pacto implica asumir compromisos, responsabilidades, cambiar; como en este caso en el que Josías y el pueblo se comprometieron a seguir Al Señor y obedecerle. Hoy no es muy común que en la relación con Dios se asuman compromisos y responsabilidades; estamos viendo un gran crecimiento de las iglesia cristianas en todo el mundo, pero, desafortunadamente la mayoría de creyentes están practicando un cristianismo sin compromiso ni responsabilidad, un cristianismo fácil que no es el de la Biblia. Debemos cambiar, debemos volver al verdadero cristianismo, a la práctica de los principios, a la obediencia a Dios.
"23.4–8 Cuando Josías se dio cuenta del terrible estado de la vida espiritual de Judá, tomó medidas al respecto. No basta con decir que creemos en lo que es correcto, debemos responder con hechos y hacer lo que la fe requiere. Esto es lo que Santiago estaba enfatizando cuando escribió «la fe sin obras es muerta» (Santiago 2.20). Esto significa que actuemos en casa, en la escuela, en el trabajo y en la iglesia de acuerdo a nuestra fe. Hablar simplemente de la obediencia no es suficiente. 23.6 El abominable ídolo de Asera, era un ídolo que el malvado rey Manasés había instalado en el templo de Dios (21.7). Muy a menudo Asera es identificada como la diosa del mar y la amante de Baal. Era la diosa principal de los cananeos. En su culto se glorificaba el sexo y la guerra, y era acompañado de prostitución masculina. 23.11 Estos caballos eran usados en procesiones en honor al sol. 23.25 Josías es recordado como el rey más obediente de Judá. Su obediencia siguió este patrón: (1) reconoció el pecado, (2) eliminó las prácticas pecaminosas y (3) atacó las causas del pecado. Este enfoque para tratar el pecado sigue siendo efectivo en la actualidad. No sólo debemos quitar las acciones pecaminosas, debemos eliminar sus causas: aquellas situaciones, relaciones, rutinas y patrones de vida que nos llevan a la puerta de la tentación.23.25 Tanto Josías como Ezequías (18.5) son alabados por su reverencia a Dios. Se dice que Ezequías fue el que más confió en Dios (fe), mientras que se dice que Josías fue el que más siguió la ley de Dios (obediencia). Podemos seguir sus ejemplos a través de nuestra confianza en Dios y nuestras acciones de obediencia" (Biblia del diario vivir).