jueves, 2 de agosto de 2007


2 Reyes 14:
La mayoría de los reyes de Judá hicieron lo malo ante los ojos del Señor. De Amasías dice la Escritura: "Y él hizo lo recto ante los ojos de Jehová, aunque no como David su padre; hizo conforme a todas las cosas que había hecho Joás su padre" (v. 3). Este rey agradó a Dios "casi por completo", pero esto no es suficiente. David no fue perfecto, cometió errores y pecados; sin embargo El Señor dice que fue un hombre "conforme a Su corazón", aunque en ningún momento hubo la intención de ocultar sus fallas y caídas; al contrario, se narran abiertamente en la historia bíblica para aprendamos de ellas y no hagamos lo mismo. Fue la actitud sincera en su corazón de querer agradar a Dios, saber reconocer los errores y pecados cuando los cometió; lo que vio El Señor en él y le agradó. Podemos y deberíamos pedir a Dios un "corazón recto" como lo hizo David.
Por otro lado, debemos cuidarnos de lanzarnos a desafíos y proyectos sin una correcta planeación y, especialmente, sin la dirección del Señor; como lo hizo Amazías: "Entonces Amasías envió mensajeros a Joás hijo de Joacaz, hijo de Jehú, rey de Israel, diciendo: Ven, para que nos veamos las caras" (v. 8). De esta manera desafió al rey de Israel a la guerra sin ninguna necesidad y fuera del plan de Dios. Este fue el resultado: "Ciertamente has derrotado a Edom, y tu corazón se ha envanecido; gloríate pues, mas quédate en tu casa. ¿Para qué te metes en un mal, para que caigas tú y Judá contigo? 11 Pero Amasías no escuchó; por lo cual subió Joás rey de Israel, y se vieron las caras él y Amasías rey de Judá, en Bet-semes, que es de Judá. 12 Y Judá cayó delante de Israel, y huyeron, cada uno a su tienda" (v. 10- 12). El Señor nos advierte en el evangelio sobre la importancia de sentarnos primero y calcular si tenemos los recursos necesarios para terminar una torre, antes de empezar a construirla, y de calcular si podemos enfrentar una lucha contra un ejército superior a nuestras fuerzas, antes de ir a la guerra. Esto fue lo que no hizo Amasías.